ESTRATEGIAS DE INVERSIÓN

 

Por Yamelis Quivera

Universidad de Yacambú

Octubre 2004-10-17

 

 

Bonos

 

Un bono es un instrumento financiero que implica una deuda contraída por una empresa con el comprador del bono. Ofrece una tasa de acuerdo al riesgo de la compañía. Generalmente un bono se valoriza a valor presente, descontado a la tasa de mercado.

Los bonos u obligaciones pueden ser emitidos por empresas privadas o por el Gobierno Nacional o sus entes descentralizados: Banco Central de Venezuela, ministerios, gobernaciones, concejos municipales, institutos autónomos y otros, siendo susceptibles de ser negociados antes de la fecha de vencimiento; entre estos tenemos los Bonos de la Deuda Pública Externa Nacional, o Bonos Brady, que son títulos valores emitidos por el Estado venezolano, dentro de un programa multinacional, para pagar deuda externa o interna. Estos títulos tienen como característica sobresaliente una interesante tasa de rendimiento, inscritos en los mercados financieros nacionales e internacionales, que pueden ser adquiridos por cualquier inversionista, sin importar su nacionalidad o residencia, puesto que están mundialmente reconocidos y aceptados.

En un bono se pueden distinguir los siguientes elementos:

 

1. Capital, principal o valor nominal de un bono(K): es el monto sobre el cual se calculan los intereses de emisión. Es el monto inicial de la deuda.

 

2. Tasa de emisión o de carátula(i): es la tasa que se le aplica al saldo insoluto del capital para calcular los intereses correspondientes al cupón.

 

3. Cupón: es el pago realizado a lo largo de la vida del bono.

 

4. Amortización: pago de la parte del capital realizados a lo largo de la vida del bono.

 

5. Plazo: vida del bono = “T” años.

 

6. Valor par: es el saldo del capital que aún no ha sido amortizado(saldo insoluto del capital). Al momento de la emisión, el valor par es igual al capital.

 

7. Tasa de descuento: “r”, correspondiente el riesgo, es una tasa base(PRC, tasa de un activo libre de riesgo) más un spread de riesgo(“x”puntos bases, que depende de la compañía). Se considera como la rentabilidad esperada.

 

Los supuestos básicos en la modelación del precio del bono son:

 

1. La tasa de retorno esperado y la volatilidad son procesos estocásticos.

 

2. El precio del bono es estrictamente positivo y aproxima su valor al llegar a la madurez.

 

3. La varianza del precio se hace cero cuando se llega a la madurez.

 

4. El retorno asociado a un bono que llega a la madurez es igual al retorno esperado de una cuenta de ahorro que paga continuamente la tasa de interés instantáneo.

 

5. Un precio de bono realista debiera considerar una medida de los cambios que puedan sobrevenir en el riesgo.

 

6. Al descontar por un bono un activo cuya tasa de retorno esperado sea igual a la tasa de interés, debiera obtenerse un proceso con crecimiento esperado nulo.

 

De los primeros supuestos se establece la llamada “ecuación fundamental” que describe la dinámica de los precios:

 

 

Al considerar que la tasa de retorno esperado y la volatilidad sean procesos estocásticos implica que ambos pueden tomar distintos valores asociados a distintos sucesos con sus respectivas funciones de probabilidad, es decir, no son valores únicos sino que dependen del contexto en que se realizan. Se incluye  entonces el azar en este modelo de valoración de bonos. Existen diversas circunstancias que afectan las infinitas variables que participan en cualquier mercado. De hecho, no sólo en el mercado de los bonos, sino también se podría considerar el mercado de las acciones, donde la variabilidad de los flujos dependiendo del estado de la naturaleza, determina el riesgo de la inversión y con ello su rentabilidad esperada.

 

Los inversionistas en general se forman expectativas acerca del rendimiento de sus fondos, saben que viven en un ambiente de incertidumbre y de riesgo, en que el azar juega un papel muy importante y decisivo en el destino de su riqueza. Muchos juegan con el azar como por ejemplo los especuladores quienes compran porque “esperan”vender más caro en el futuro, pero lo que ellos esperan no necesariamente será lo realizado. Por otro lado se pueden considerar el precio de otros activos e incluso el precio del dólar. El solo hecho que el Banco Central anunciara una modificación de la tasa de interés o la noticia de alguna posible guerra en un país vecino, o en posible crisis en una economía grande, o que una empresa se fusionará con otra, etc., modifican también las expectativas de todos los inversionistas los que cambian sus decisiones afectando el precio de los activos.

 

Valoración de Vebono

 

Antes de adentrarnos en la negociación de los Bonos de la Deuda Pública Nacional Emisión  511 conocido como VEBONOS, debemos entender y manejar algunos conceptos que servirán para brindar una mayor comprensión de este tipo de “Instrumento de Deuda”, dentro del Mercado de Capitales.

Los Bonos de la Deuda Pública Nacional, son instrumentos emitidos por el Estado Venezolano para atender sus compromisos de pago é inversión en el sector público. Estos instrumentos permiten que el estado venezolano obtenga el capital requerido a través del ofrecimiento de un rendimiento competitivo que atraiga a posibles inversionistas que deseen canalizar sus ahorros a través de este mercado. Para el caso de los VEBONOS, el Estado Venezolano ha utilizado estos instrumentos para pagar una deuda contraída con los profesores universitarios, financiándola a través de la emisión de este tipo de instrumentos.

Los Bonos de la Deuda Pública Nacional son instrumentos de largo plazo cuya duración puede variar según lo estime el Estado Venezolano (para el caso de los VEBONOS el plazo del instrumento es de 3.5 y 4 años respectivamente). Durante este período los bonos de deuda normalmente pagan un interés cada tres (3) meses, seis (6) meses ó un año (para el caso de los VEBONOS, éstos pagarán los intereses transcurridos cada tres (3) meses). Este tipo de inversión asegura un ingreso de efectivo en forma continua a su tenedor, hasta el vencimiento del plazo de la deuda, fecha en la cual el Estado Venezolano reintegraría al tenedor del instrumento, el monto del capital (100%) que éste representa

Los montos de efectivo ó rendimiento que otorga un Bono de la Deuda Pública a través del tiempo son conocidos como Cupones y representan los trimestres, semestres ó años que el instrumento otorgará como beneficio al tenedor. Este flujo de cupones puede ser calculado tomando una tasa de interés que no variaría en el tiempo ó con una tasa de interés que variaría cada tres meses, seis meses ó un año (en el caso de los VEBONOS la tasa de interés será revisada cada tres meses), en base a una tasa referencial de interés anual. (En nuestro caso, la base referencial de la tasa para los VEBONOS vendrá dada por la tasa que fije la colocación de las Letras del Tesoro a 91 días más 250 puntos base).

La forma de calcular el rendimiento de los cupones variará dependiendo del procedimiento utilizado para el cálculo de los días del cupón. En la actualidad podemos encontrar tres tipos de cálculo en el mercado, a saber:

- Real (ó actual) / 365: Esto indica que se toman para el cálculo de los días efectivos del cupón, los días reales entre dos fechas establecidas, divididos entre el número real de días en una año (365 ó 366). (Fecha en que comienza a regir el primer cupón y fecha en que culmina éste último, tomando en consideración que son días continuos.)

- Real (ó actual) / 360: Esto indica que se toma para el cálculo de los días efectivos del cupón; es decir, los días reales entre dos fechas establecidas, divididos entre un año de 360 días.

- 30 / 360: Esto indica que se toma para el cálculo de los días efectivos del cupón, los días transcurridos entre dos fechas, como si todos los meses del año fuesen de 30 días y divididos entre un año de 360 días.

Para el caso de los VEBONOS, la base de cálculo será Real (ó actual) / 360

Acciones

 

Son títulos valores que representan una parte del capital de la empresa que las emite, convirtiendo a su poseedor en co-propietario de la misma en la medida de su inversión. Para el inversionista las acciones representan un activo en su patrimonio y puede negociarlas con un tercero a través de las bolsas de valores.

 

Se presentan cuatro modelos de valoración:

 

1. El Capital Asset Pricing Model (CAPM): Modelo según el cual en un mercado eficiente, el rendimiento esperado de cualquier activo o valor, deducido según el precio al que se negocia, es proporcional a un riesgo sistemático. Cuando mayor es dicho riesgo, definido por su sensibilidad a los cambios en los rendimientos del conjunto del mercado, es decir, el coeficiente beta, mayor es la prima de riesgo exigida por las inversiones y mayor es, por lo tanto, su rendimiento. La teoría implica que, por medio de la diversificación, se puede reducir la parte no sistemática del riesgo total de una cartera, mientras que el riesgo sistemático, determinado por el propio mercado, es imposible de reducir.

 

(a)La rentabilidad  debe ser proporcional al riesgo: a mayor rentabilidad, mayor riesgo, y viceversa. La rentabilidad esperada de una acción será:

 

 

(b) El riesgo total de una acción (variabilidad en su precio) puede dividirse en sis­temático y no sistemático.

- El riesgo sistemático es el que se debe a la bolsa: una acción sube porque sube toda la bolsa.

 

- El riesgo no sistemático:  es la variación en el precio de la acción debida a causas exclusivas de la propia empresa. Se conoce que este riesgo se puede eliminar diversificando la cartera. Por tanto, el accionista no debería esperar ninguna prima de rentabilidad como consecuencia de este riesgo, ya que es un riesgo que podría eliminar si quisiera.

 

El coeficiente que relaciona el riesgo de mercado con el riesgo sistemático de la acción, se denomina beta.

 

De lo expuesto se concluye que la prima de riesgo de una acción debe ser proporcional a su riesgo sistemático. Si la acción tiene b veces más riesgo sistemático que el mercado, su prima de riesgo debe ser b veces la prima de riesgo del mercado.

 

O también:

 

Donde:

 

(rs-rf): Prima de riesgo de la acción en el pasado, es la variable dependiente o a explicar.

 

(rm-rf): Prima de riesgo del mercado en el pasado, es la variable independiente o explicativa.

 

e: Errores o residuos.

 

Dado que es la pendiente de la recta, beta muestra en qué medida los rendimientos de un activo, compilados históricamente, cambian sistemáticamente con las variaciones en los rendimientos del mercado. Por ello se considera a beta como un índice del riesgo sistemático debido a las condiciones generales del mercado que no pueden ser eliminadas por la diversificación.”[4]

 

- Si beta es mayor que 1, las acciones subirán y bajarán más que el mercado.

 

- Si beta es igual a uno, las acciones subirán y bajarán igual que el mercado.

 

- Si beta es menor que 1, las acciones subirán y bajarán menos que el mercado.

 

Ello significaría que si una empresa tiene un beta igual a 1,8, por cada movimiento de los rendimientos del mercado (con un alfa muy bajo) los rendimientos de la empresa cambian en 1,8 veces. Cuando un activo tiene un beta superior a 1 se llama agresivo y si es menor que 1 se denomina defensivo.

 

Lo normal es asumir que el coeficiente beta que ha tenido una acción en el pasado reciente es la que va a tener en el futuro próximo. El beta en el pasado reciente lo calculamos por medio de una regresión, utilizando datos históricos de las primas de riesgo de la acción y del mercado durante, por ejemplo, los últimos cinco años, pero no más de diez. Para estimar la rentabilidad futura de la acción, se utilizará el beta calculado y una estimación de la prima de riesgo de mercado.

 

Pero si el CAPM no se cumple, puede ser que encontremos acciones que siste­máticamente obtengan una rentabilidad superior a la prevista por el CAPM, expre­sada en la ecuación. Es decir, la ecuación se transformaría en la siguiente:

 

 

En este caso, la prima de riesgo de la acción será superior a la que le corresponde por su riesgo sistemático y tendremos una acción con mejor relación rentabilidad/riesgo que la que debería.

 

2. Modelo de Valoración por Arbitraje (APT)

 

Modelo según el cual una cartera óptima estará constituida por aquellos valores que proporcionen un rendimiento máximo para el riesgo soportado, definido éste por su sensibilidad a los cambios económicos inesperados, tales como los cambios imprevistos en la producción industrial, en el ritmo de inflación y en la estructura temporal de los tipos de interés.

 

Este modelo comienza suponiendo que la rentabilidad de cada acción depende en parte de factores o influencias macroeconómicas y en parte de sucesos que son específicos de esa empresa.

 

La rentabilidad viene dada por la siguiente fórmula:

 

Rentabilidad = a + b1 (rfactor 1) + b2 (rfactor 2) + b3 (rfactor 3) + ... + perturbaciones

 

Los pasos para realizar  este modelo, son los siguientes:

 

1.      Identificar los factores macroeconómicos que afectan a una determinada acción.

 

2.      Estimar la prima de riesgo de los inversores al tomar estos riesgos de los factores.

 

3.      Estimar la sensibilidad de cada acción a esos factores: se deberán observar los cambios ocurridos en el precio de una acción y ver cuán sensibles han sido a cada uno de los factores.

 

4.      Calcular las rentabilidades esperadas: se deberán aplicar los valores por prima de riesgo y las sensibilidades del factor en la fórmula de APT, para estimar la rentabilidad requerida por cada inversor.

 

Para concluir, hay que destacar que el APT tiene aspectos que lo hacen promisorio para determinar el rendimiento esperado de un activo financiero. No obstante, cambia los problemas del CAPM de determinar la cartera de mercado verdadera por el problema de establecer cuáles son los factores de riesgo sistemático y la medición de los factores.

 

3. El Modelo de Mercado

 

En el modelo de mercado, a diferencia del CAPM, la rentabilidad de la acción depende direc­tamente de la rentabilidad del mercado:

 

 

El modelo refleja la intuición práctica de todos los inversores de que el com­portamiento del mercado afecta a todas las acciones. La beta obtenida en el CAPM, en el APT y en el modelo de mercado es la misma numéricamente y su interpretación es exactamente la misma. La diferencia, desde el punto de vista de los resultados, está en el coeficiente alfa. Las fórmulas de CAPM y modelo de mercado son iguales si hacemos:

 

 

Si beta es próxima a 1, el valor del término independiente alfa debería ser cero; y también si la rentabilidad libre de riesgo es pequeña, el término independiente es insignificante.

 

Los coeficientes alfa y beta se calculan por regresión con datos históricos de la rentabilidad de la acción y la de un índice bursátil. Para hacer previsiones utilizamos estos pará­metros ya calculados y una estimación de la rentabilidad futura del mercado.

 

En cuanto al riesgo total, este modelo nos plantea que se puede dividir en dos componentes:   El riesgo sistemático, o de mercado, y el no sistemático.

 

Por otra parte, los movimientos de la acción provenientes del riesgo sistemático o de mercado, son explicados por R2, que es el coeficiente de correlación r al cuadrado.

 

El R2 varía mucho de una acción a otra. Para acciones de empresas grandes y estables, que tienen mucho peso en el índice, suele superar el 50 por 100. Un R2 bajo se obtiene en el caso de pequeñas empresas, donde puede darse el caso de que el coeficiente beta sea alto, y aquí no podría utilizarse el modelo para hacer previsiones de rentabilidad, ya que la acción tendría un gran componente de riesgo no sistemático.

 

Las dificultades de orden práctico son similares que para el CAPM.

 

4. Análisis fundamental: valoración de acciones (Bottom-up)

 

Consiste en valorar las acciones y comparar el precio resultante del análisis con el precio de mercado, buscando encontrar acciones minusvaloradas, que constituirán, según nuestro análisis, una buen oportunidad de inversión

 

Existen para dos métodos para esta valoración

 

(a) Métodos basados en ratios bursátiles:

 

A diferencia de los métodos anteriores, estos métodos se basan en la cuenta de resultados de la empresa y son muy usados en la valoración de acciones en bolsa. Tratan de determinar el valor de la empresa a través de la estimación de su rentabilidad futura.

 

-Valor de los beneficios. PER

 

El PER (Price Earnings Ratio) o también llamado ratio precio-beneficio de una acción indica el múltiplo del beneficio por acción que paga la bolsa.

 

 

Índice bursátil que resulta de dividir la cotización en Bolsa de una acción por el beneficio neto, después de impuestos, correspondientes a cada acción en el ejercicio, es decir, es el número de veces que el beneficio neto está contenido en el precio de la acción. También se llama Tasa de Capitalización de Beneficios. Si el mercado cotiza un PER elevado, significa que las expectativas del valor de que se trata son muy favorables, basada esencialmente en los beneficios futuros. Mide el tiempo que ha de transcurrir para que se amortice el importe desembolsado en la adquisición de un valor

 

Para calcular el PER se utiliza habitualmente el beneficio esperado del año en curso, aunque es frecuente calcularlo también con e1 último beneficio publicado. Hay que tener en cuenta que el PER de una acción calculado por dos analistas puede ser muy distinto, según la magnitud del beneficio que utilicen; pueden utilizar beneficios del año pasado o los previstos para el año en curso. Las previsiones de beneficios futuros variarán entre analistas, y como consecuencia, el PER resultante será distinto.

 

El valor de las acciones se obtiene multiplicando el beneficio por acción esperado por el PER habitual de la acción:

 

Precio = PER x beneficio por acción

 

Por ejemplo, si el PER habitual de una empresa es 15 y esperamos que el beneficio por acción para los próximos años sea 10 pesos, el precio de la acción debería ser: P = 15 x 10 = 150. Por lo tanto, la acción todavía se podría revalorizar en el mercado.

 

El PER de una acción debe ser coherente con el PER de las empresas del mismo sector y con las características de la empresa.

 

 Una primera aproximación a cuál es el PER adecuado para una determinada acción es utilizar el PER como el inverso de la rentabilidad:

 

Rentabilidad = BP/Precio

PER= Precio/BPA           1/rentabilidad

 

Por ejemplo, si el tipo de interés sin riesgo es del 4 por 100, la rentabilidad míni­ma que le pediremos a la acción será el 4 por 100, lo que se corresponde con un PER de 25:

 

PER = Inverso de la rentabilidad = 1/Tipo de interés sin riesgo = 1/4% = 25

Pero el tipo de interés libre de riesgo es sólo uno de los elementos que influyen en el PER. Otro elemento importante es el crecimiento esperado de los beneficios futuros. Si los beneficios futuros crecen a una tasa g, el precio de la acción debería ser mayor y, por tanto, su PER será mayor.

 

Simplificando mucho, el PER máximo adecuado de una acción vendrá dado por:

 

 

 

Donde la k es la rentabilidad que le pedimos a la acción (el interés libre de riesgo más una prima de riesgo) y g es la tasa de crecimiento de los beneficios.

 

A su vez, el crecimiento de los beneficios g depende de la rentabilidad sobre recursos propios (ROE[6]) y del porcentaje de beneficios distribuidos como dividendos o pay out.

 

Por tanto, el valor del PER depende de las siguientes magnitudes: rentabilidad libre de riesgo, prima de riesgo exigida a las acciones, rentabilidad de los recursos propios, crecimiento esperado de la empresa, pay out o porcentaje de los beneficios que se reparten vía dividendos.

 

Cuando aumenta el tipo de interés aumentará también la rentabilidad exi­gida a la acción, y por tanto bajará el precio que estamos dispuestos a pagar (suponiendo que no cambian los beneficios). Pagaremos menos para obtener más rentabilidad y por tanto el PER bajará.

 

Si aumenta el riesgo de la empresa, la prima de riesgo aumentará, y por tanto también la rentabilidad exigida por los accionistas  a la acción. De ahí que pagará un precio inferior y el PER bajará. Es decir, los accionistas ahora sólo están dispuestos a comprar a un PER menor que el anterior, pues quieren obtener más rentabilidad, ya que el riesgo de la empresa ha aumentado.

 

Un aumento de la rentabilidad sobre recursos propios produce  una subida del PER, ya que la empresa será más rentable, los beneficios futuros crecerán más deprisa y los inversores estarán dispuestos a pagar más por cada peso de beneficio.

 

El incremento en el pay out aumenta­rá el PER en el caso de que la rentabilidad exigida a la acción sea mayor que el ROE. En este caso, el mercado valora positivamente que la empresa repar­ta mayores dividendos al ver el accionista mejores posibilidades de inversión fuera de la empresa. Si la rentabilidad exigida a las acciones es menor que el ROE, entonces los aumentos de la tasa de reparto disminuyen el PER. La razón es que las oportunidades de inversión de la empresa justifican la reinversión de los beneficios y no su reparto vía dividendos.

 

Si el PER que se da en el mercado es inferior al calculado, la acción puede estar minusvalorada, y ser así una buena oportunidad de inversión; al contrario si el PER de mercado es superior al calculado como PER adecuado. Muchos gestores de carteras utilizan el PER como regla de selección de accio­nes: compran acciones con PER bajo. Pero es importante analizar por qué el PER es bajo; puede ser porque el mercado no ha reconocido el potencial de la acción o sim­plemente porque realmente las perspectivas de la acción no son tan buenas como pensamos.

 

(b) Métodos basados en el Valor Patrimonial

 

Consideran que el valor de una empresa radica fundamentalmente en su balance. Son métodos estáticos, ya que no contemplan la posible evolución futura de la empresa, el valor temporal del dinero, ni otros de los factores que también afectan a ésta, como puedan ser la situación del sector, problemas de recursos humanos, de organización, contratos, etc., que no se ven reflejados en los estados contables.

 

- Valor contable

 

El valor contable, valor en libros o patrimonio neto de una empresa, es el valor de los recursos propios que aparecen en el balance. Es también la diferencia entre el activo total y el pasivo exigible. De este concepto surge el valor contable teórico de una acción, también llamado Valor Patrimonial Proporcional, que resulta de dividir el patrimonio neto de la empresa por el número de acciones ordinarias emitidas.

 

- Valor contable ajustado

 

Con­siste en valorar cada una de las partidas del balance a su precio de mercado. La dife­rencia entre el valor de mercado del activo y el del pasivo nos dará el valor contable ajustado. Trata de salvar el inconveniente de aplicar criterios exclusivamente contables en la valoración.

 

- Valor de liquidación

 

Es el valor de una empresa en caso de liquidación, es decir, que se vendan sus activos y se cancelen sus deudas. Se calcula deduciendo del patrimonio neto ajustado los gastos de liquidación del negocio (indemnizaciones a empleados, gastos legales, gastos fiscales y otros gastos propios de la liquidación). Citaremos la definición del Diccionario de Términos  Financieros y de Inversión:

“Valor monetario que se obtiene al liquidar una participación en un fondo dividido por el número de participantes en circulación.

 

Sólo puede utilizarse este método en caso de compra de la empresa con el fin de liquidarla posteriormente. Siempre representa el valor mínimo de la empresa, ya que normalmente el valor de una empresa suponiendo su continuidad es superior a su valor de liquidación.

Ejemplo Con VenBonos (Bolsa de Valores de Caracas

El precio de un bono:

Sí tenemos un bono de Bs. 1.000.000,00 con un vencimiento de 4 años, el cual paga intereses cada tres meses a una tasa de 10% anual. ¿Cual será el precio del instrumento al momento de ser emitido?

Primero calcularemos el “Valor Presente del Flujo de Cupones:

Cada cupón paga (10% en 12 meses ) * 3 meses; lo equivalente a 2,5%. Este porcentaje al multiplicarlo por el valor par del instrumento daría Bs. 25.000,00. Por lo tanto en nuestra formula:

“C” sería igual a Bs. 25.000.00; lo que correspondería al pago efectivo de cada cupón.

“n” sería igual a 16, ya que cada año tiene 4 trimestres y sí el instrumento tiene una vigencia de 4 años, se realizarían 16 pagos de intereses durante los cuatro años respectivos.

“r” sería igual a 2,5%, ya que sí la tasa es 10% anual, esta se debe dividir entre cuatro (trimestres).

Ahora calcularemos el Valor Presente del Valor Par del Bono:

“M” será igual a Bs. 1.000.000,00 ; correspondiente al 100% de su valor nominal.

“n” sería igual a 16, ya que cada año tiene 4 trimestres y sí el instrumento tiene una vigencia de 4 años, se realizarían 16 pagos de intereses.

“r” sería igual a 2,5%, ya que sí la tasa es 10% anual, esta se debe dividir entre cuatro (trimestres).

Por lo tanto, sí sumamos los dos resultados tendremos 326.375,066 + 673.624,934 = 1.000.000

Como pudimos observar, los cálculos realizados dan efectivamente el Valor Facial del instrumento. Ahora bien, sí al momento de tomar la decisión de vender, las tasas de interés de los otros instrumentos con similares características fuesen iguales a la de nuestro instrumento, el título valor podría venderse al 100% de su valor, o lo que es lo mismo a su Valor Par.

Ahora bien, al momento de comprar ó vender un instrumento financiero como son los bonos, debemos tomar en consideración que todo instrumento dentro del Mercado de Capitales se encontrará compitiendo contra otros tipos de instrumentos que pudieran ser más atractivos para el inversionista; en lo cual debería observarse o compararse aspectos como: Las variaciones en las tasas de interés, el período de vigencia del instrumento, la demanda y oferta sobre los instrumentos entre si, etc.

Para ilustrar un poco más los factores que intervienen en el precio de un instrumento financiero al momento de valorarlo, tomaremos del ejemplo anterior y, asumiendo que existen en el Mercado de Capitales instrumentos similares que estuviesen ofreciendo una tasa de interés más atractiva a la del bono en cuestión, tendremos:

M = 1.000.000,00
n = 16 trimestres
r = 10% anual ó 2,5% trimestral
c = 25.000,00
R = 12% anual ó 3,00% trimestral

(Esta sería la tasa de interés presente en el mercado  que estaría en competencia con la del bono en cuestión)

Para determinar cual sería el precio de nuestro instrumento, a fin de ser competitivo frente al mercado, debemos sustituir la tasa de 2,5% en nuestras formulas por la de 3% que se encuentra en el mercado. Bajo esta condición tendríamos el siguiente resultado:

Por lo tanto, sí sumamos los dos resultados tendremos 314.027,551 + 623.166,939 = 937.194,49. (Valor Presente de Flujo de Cupones + Valor Presente del Valor Par del Bono).

Bajo estas condiciones para que nuestro instrumento sea atractivo, el precio de venta debería ser 93,719 % aproximadamente. En otras palabras, el instrumento debería ser vendido con un precio a Descuento; considerando las tasa más alta que estarían pagando otros tipos de instrumentos en el mercado.

 

Infografía

 

Introducción

http://www.mat.puc.cl/~rrebolle/Azar/Trabajos/farfan.pdf

 

Métodos de Valoración de Acciones

http://www.stockssite.com/mc/00_introduccion.htm

 

 

Bolsa de Valores de Caracas

http://www.caracasstock.com/isinycfi/cfi/debt1.jsp