Como todos los 8 de septiembre, la Virgen de Guadalupe procesionó, en el día de su onomástica, por las calles de Úbeda. El día comenzó bien temprano, pues a sobre las 8 de la mañana los cohetes indicaban el comienzo del día de fiesta. A las 11 y media de la mañana, una multitud que abarrotó San Pablo asistió a la Fiesta Principal, presidida por el vicario, D. José Lomas Mayas, y concelebrada por todos los párrocos de la ciudad. Tras la misa, la cofradía celebró una comida de hermandad, a las 2 de la tarde, en el Hotel María de Molina.

A las 8 de la tarde dio comienzo la procesión, que se iniciaba con una bella cruz parroquial y el estandarte de la Archicofradía, al que seguía la Banda de Cornetas y Tambores María Santísima de las Penas, conocida en Úbeda como “la Sentencia”. Tras ella, representantes de todas las cofradías y asociaciones religiosas de Úbeda. En particular, hay que destacar la presencia, por primera vez, de la Asociación Don Bosco- Prendimiento y del Grupo Parroquial Virgen de las Lágrimas que, como sabrán los lectores, son dos cofradías actualmente en fundación en Úbeda. También acudieron mujeres de mantilla y niñas vestidas de romeras. Tras ellas, la Virgen de Guadalupe, en su paso de plata meneses con el palio y manto de terciopelo verde, luciendo corona de oro. La venerada llevaban sus caballeros horquilleros, con dos escuadras completas. Finalizaba la procesión con la presidencia eclesiástica, en la que figuraban el Vicario D. José Lomas Mayas, junto con D. Antonio Javier Cañada Morales y D. Juan Navarrete y las autoridades civiles, entre las que cabe destacar al alcalde, D. Marcelino Sánchez, y la bandera de la Archicofradía. Cerrando, la Agrupación Musical Ubetense.

Con bastante público, la procesión trascurrió por Plaza del 1º de Mayo, Montiel, donde paró ante la Residencia de Ancianos, por petición de su director. Continuó por Pza. de Santa Teresa, Corredera, Pza. de Andalucía, Pza. del Doctor Quesada, Real, Juan Montilla, Pza. del Ayuntamiento, Juan Montilla, Pza. de Vázquez de Molina. Allí, sobre las 9 y media de la noche, la Virgen paró ante la puerta de Santa María, reivindicando su apertura, y se rezó una salve. Después, continuó por Juan Ruiz González, y Pza. del 1º de Mayo, a su templo, entrando en el templo sobre las 10 y cuarto de la noche.

Con esta procesión culminan los actos en honor de Nuestra Señora de Guadalupe, patrona de Úbeda, que tendrán su epílogo el día 15 con la “Romería Chica”, que comenzará a las 6 y media de la mañana con Santa Misa en la Iglesia de San Pablo. A continuación, D. Francisco Barbero tendrá el honor de despedirse, en nombre de todos los ubetenses de Nuestra Patrona en el Molino de Lázaro. Proseguirá la procesión, en lo que se viene a llamar “Romería chica” hasta Santa Eulalia, donde se celebrará la Eucaristía, finalizando en el Santuario, donde se volverá a celebrar la Eucaristía. Como de costumbre, habrá un autobús preparado para llevar a los que lo deseen al Santuario a despedir a la Virgen.

La Archicofradía quiere hacer un llamamiento para que aumente la colaboración de los fieles ubetenses, en particular para las obras del Santuario, que aún prosiguen y de las que daremos noticia más adelante, y para aumentar el número de caballeros horquilleros.

TEXTO: Rafael J. Merelo Guervós