De sobra es conocida por
todos la historia de Dña. Magdalena de Luis Díaz, “La Marcela”. Mujer
que llegó a El Coronil a finales del siglo XIX, y que habitó en la
zona de extramuros, en la casa conocida como “La casa de La Marcela”.
Allí compartió hogar con Marcelo Cerruti, un señor que fue enviado por
el padre de Magdalena, Wenceslao de Luis (un naviero con gran capital
y que se dedicaba a negocios no muy claros con mercancías de otros
países), para que cuidara y administrara el dinero que él enviaba para
mantener a su hija. Señorita que se codeaba con la sociedad más alta
de nuestro pueblo, eran famosas las
fiestas que se organizaban
en su casa, a las que asistían personas de diferentes pueblos de la
comarca.
Pero también llegaron
momentos malos, que durarían hasta su solitaria y pobre muerte, ya que
su padre dejó de enviarle dinero por diferentes causas y además fue
abandonada por el Sr. Marcelo Cerruti.
En publicaciones anteriores
se detallaba que había quedado embarazada siendo esa la causa por la
que su padre la envió a El Coronil. Al hijo que tuvo le puso por
nombre Jaime, pero el niño falleció entre los siete y los diez años,
siendo este hecho ocultado a su padre para que éste no dejara de
mandarle dinero desde las Islas Canarias. El niño fue enterrado en los
aledaños de la casa, pero la muerte de Jaime no tardó en ser
descubierta por el Sr. Wenceslao que enviaba asiduamente a mensajeros
para que le informara del estado de su hija y de su nieto. Al
enterarse de la muerte de su nieto y del engaño al que fue sometido
por su hija, decidió dejar de mandarle dinero y además despidió al Sr.
Marcelo Cerruti. De estos hechos no hemos encontrado datos que los
confirmen, pero si hemos encontrado datos que pueden cambiar esta
historia.
Doña Magdalena además del
supuesto hijo que tuvo llamado Jaime, tuvo otro hijo al que puso por
nombre Marcelo. El nombre completo de éste niño era Marcelo Cerruti
Luis; por los apellidos que se le pusieron al niño podemos deducir que
Magdalena tuvo algún tipo de relación con el Sr. Cerruti fuera de la
que en un principio era la que tenía que cumplir, éste niño era hijo
de Dña. Magdalena y del Sr. Cerruti. Nació en París entre los meses de
febrero y marzo de 1897, una vez que tuvo al niño regresó a El Coronil
donde su hijo desgraciadamente falleció el día 2 de junio de 1897
cuando sólo contaba con tres meses de edad, víctima de un catarro
intestinal agudo. Fue enterrado al día siguiente en el Cementerio de
San Sebastián1.
Como podemos comprobar no
hay ningún tipo de semejanza entre Marcelo y el supuesto Jaime. No
sabemos si en realidad tuvo dos hijos o sólo tuvo al citado Marcelo,
que es el único que podemos asegurar mediante datos suficientemente
fiables.
En fin toda esta historia
espera nuevas investigaciones para ser descubierta en su totalidad,
mostrando la verdadera faceta de Dña. Magdalena, una mujer que tuvo
mala suerte en la vida y que no ha sido reconocida su insufrible lucha
por vivir en una sociedad que la vio pasar de la más absoluta nobleza
a la miseria y la soledad.