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Domingo J Navarro y
Pastrana (1803-1896).
Comenzó sus estudios en el Seminario Conciliar de Las
Palmas de Gran Canaria y obtuvo en Barcelona la licenciatura de Medicina. Se destacó antes de terminar sus estudios por su competencia y desinterés en la epidemia de
cólera que azotó aquélla ciudad en el pasado siglo.
Al llegar a Las Palmas de Gran Canaria en 1837 obtuvo la plaza de medico titular y la del Hospital de San Lázaro. Ambos cargos los ejerció hasta muy avanzada edad.
Le tocó vivir las jornadas angustiosas del cólera en aquella Isla en el año 1851, en las que tuvo ocasión de servir con la experiencia adquirida en
Barcelona.
Para premiar su humanitaria conducta fue nombrado Caballero de la Real Orden de Isabel la Católica.
Se destacó no sólo por el ejercicio de su profesión, sino también por su oratoria elegante y por haber acudido a todo
impulso cultural con el entusiasmo que le era innato.
Fue Presidente del Gabinete Literario y de "El Museo
Canario", Censor de la Sociedad Económica,
profesor del Seminario y del Colegio de San Agustín.
Por todos estos méritos recibió, entre otros honores, el
nombramiento de médico de Cámara de Isabel II en 1864, la Gran Cruz de
Isabel la Católica en 1871 y la del Mérito Naval en 1894.
De una gran vitalidad, llegó a la vejez con su mente clara
y despejada y nombrado cronista de la Ciudad, publicó en 1896 su
interesante obra "Recuerdos de un noventón", que puede ser
destacada como obra maestra de algo que pudiéramos llamar
"literatura mínima".
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